Cómo lograr que los niños coman más vegetales.

Cómo lograr que los niños coman mas verduras. «Cómete las verduras» o «No te paras de la mesa hasta que te termines todo» son dos de las frases que acostumbraban decirnos. ¿Recuerdas?

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Hoy te propongo una manera mas amigable de lograr en tus hijos el buen hábito de comer vegetales todos los días para prevenir enfermedades y tener una vida saludable:

  1. Recuerda que tu rol como mamá/papá es servir alimentos saludables en el plato de tus hijos (y en el tuyo) y tratar que la hora de la comida sea una experiencia que disfruten.  No es necesario «rogarles» ni «presionarlos» para que coman, solo hay que ayudarlos a desarrollar buenos hábitos de alimentación. Puedes hacer conciencia comentando que si se come las galletas no van a poder correr tan rápido en el partido de futbol, o que si se come la ensalada su vista va a ser mas aguda y sus movimientos más ágiles, por ejemplo.
  2. Introduce los alimentos varias veces hasta que decida probarlos. Hay que ser pacientes, puede ser que a la décima ocasión se va a animar a comer la coliflor y  le encante. Pero hay que ser persistentes, guisándolos de distintas maneras… y confiando en el proceso.
  3. Presenta las verduras de maneras divertidas o intrigantes. Por ejemplo, puedes poner una «tapita o ventanita» para que la levante y descubra el «tesoro». Juega con los colores del arcoiris, puedes poner unas tiritas de tomate, luego zanahoria, luego brócoli, etc.  o pedirle a tu pequeño que el/ella dibuje el arcoiris con los vegetales en su plato. Y el aderezo lo puedes poner en una «copita» hecha con pepino. En el verano pueden preparar paletas de hielo y jugar con los sabores y colores naturales de la fruta.
  4. Podrías disfrazar un poco los vegetales para que los coman más. Puedes moler un trozo de zanahoria en su smootihe de fresa, va a pasar desapercibido. O también podrías poner en la licuadora un trozo de manzana, incluso de calabacita, en la masa de los muffins antes de hornearlos.
  5. Involucra a los niños en la planeación y preparación del menú. Cuando vayas al super con tus hijos puedes ponerles un reto: Encuentra la fruta más rara que veas. O pedirle que escoja algo nuevo cada vez que vaya al mercado contigo. Les encanta sentirse independientes y que toman parte de las decisiones. Puedes ponerles tareas en cocina según su edad y les puedes dar el puesto de «degustador oficial» para que a todo lo que vayan guisando le de «el visto bueno» o sugiera alguna mejora. Se va a sentir importante y es probable que pruebe de todo. Puedes pedirles que busquen recetas que les gustaría preparar con ciertos ingredientes.
  6. Habla bien de la comida. Los niños imitan lo que hacemos y podemos influir en sus gustos. No es casualidad que a mi sobrina no le gusta la papaya, igual que a su mamá. En lugar de decir sabe horrible… puedes tratar de describir, su olor, sabor y textura.
  7. Aprovecha la curiosidad natural de los niños y sus ganas de explorar. La comida puede ser una excelente oportunidad de aprendizaje. Pueden hacer pequeños experimentos científicos en la cocina. ¿Qué pasa si cocemos el brócoli? ¿Cambia su sabor, se pone más suave, cambia su color? También puedes hacerles comentarios sobre datos de alimentos que conozcas «¿Sabes porqué los espárragos son super cool? ¿Sabes cuántas semillitas tiene una fresa? Incluso puedes darle una lupa para que las vea. ¿Sabías que las lentejas están llenas de proteína que ayudan a tus músculos a saltar mas alto?

Enseñar a los niños buenos hábitos de alimentación puede ser todo un reto, pero conociendo el impacto positivo que esto tendrá en su vida, estoy segura que el esfuerzo vale la pena.

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¡Saludos y nos mantenemos en contacto!

Ing. Bioq. Carla Zuria

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